Poesía

Eternizando el silencio
que tu partir perpetuara,
te fuiste como el alba
iniciando el camino…

mas tu nunca has partido,
solo quedó sellada
la luz de tu mirada,
caricia que trae el viento

desde tu eterna morada,
en letra escrita trasciendo
la paz que deja la nada
con corazón y manos dibujo

tu enorme figura amada
porque el recuerdo está hecho
de cada caricia prodigada,
porque en mi alma te guardo

y renaces cuando en silencio…
muy en silencio aprisiono,
en ese dulce sueño que abrazo
el calor de tus manos...
tu fe y tu entusiasmo...
y entonces evoco…
ese brillo intenso, de tu dulce mirada



Tengo en el sueño la puerta, que trasciende el presente y es ahí que te encuentro,
con esa tu luz perene... por eso mis ojos cierro, esperando el encuentro, en donde llegas de nuevo, en donde sigues viviendo...


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