Los rayos de sol que recibimos siempre son los mismos. Sin embargo, dependiendo de dónde
estemos, pensamos en el sol de una forma u otra.
El sol de la playa: lo identificamos como “peligroso”. Al estar más expuestas a él, notamos su impacto en la piel más rápidamente .
El sol de la montaña: considerado como “traidor”. No lo notamos, pero luego llegamos a casa quemadas después de una excursión.
El sol de la ciudad: creemos que es “inofensivo”. Debemos tener conciencia de que a pesar de los edificios, nuestra piel sigue recibiendo toda la fuerza de los rayos.
¿Qué es la radiación solar?
Es el flujo de energía que recibimos del sol. Una exposición sin protección está ligada a quemaduras, envejecimiento prematuro y graves enfermedades cutáneas
La radiación UV-A aumenta la formación de radicales libres, produciendo un envejecimiento prematuro y daños permanentes en la dermis. Es también responsable de diferentes efectos biológicos como el bronceado inmediato, el fotoenvejecimiento y las manchas solares de la piel.
La radiación UV-B es la responsable tanto del bronceado como de las quemaduras solares. Provoca alteraciones visibles en el tono y aspereza de la piel, así como cambios en la estructura de nuestro ADN.
La radiación Infrarrojo-A (IR-A) tiene efectos nocivos sobre la piel, ya que penetra hasta la capa más profunda: la hipodermis. El resultado visible es la presencia de arrugas más profundas y numerosas, pérdida de elasticidad, pérdida de colágeno, en definitiva, fotoenvejecimiento de nuestra piel.
¡El sol sale cada día! Por eso, si queremos cuidar nuestra piel, debemos elegir un protector solar que sea capaz de defendernos de las tres radiaciones: UV-A, UV-B e Infrarrojos-A (IR-A). Así que una buena triple protección solar, como la de Ladival, es la mejor garantía para que nuestra piel conserve su juventud. Como hemos visto, entre los efectos adversos del sol destacan las quemaduras, las insolaciones, el envejecimiento de la piel o incluso la inducción del cáncer. De ahí la importancia de protegerse de las radiaciones solares con un producto que nos permita disfrutar de los efectos beneficiosos (bronceado sano y saludable, buen humor, calor, vitamina D…) sin preocuparnos de los riesgos.
Ladival Urban Fluid
El sol es necesario para nuestro día a día: nos mejora el estado de ánimo, es una fuente de luz y vida, nos broncea, nos aporta vitamina D… pero para exponernos al sol es preciso que nos protejamos eficazmente para prevenir quemaduras, enfermedades en la piel y un envejecimiento prematuro. Ladival Urban Fluid es la nueva protección solar facial de Ladival de rápida absorción. Está formulado con un aditivo de origen natural que se armoniza con la piel y proporciona una protección invisible frente a la luz solar. Su textura fluida ultraligera proporciona un efecto matificante para un acabado sin brillos. Con un factor de protección solar (FPS) 50+, es el complemento perfecto para cualquier hora del día y situación. Además, su formulación sin lo hace adecuado para a todo tipo de pieles, incluso las más sensibles.
¿Cómo aplicar el protector solar?
El sol de la playa: lo identificamos como “peligroso”. Al estar más expuestas a él, notamos su impacto en la piel más rápidamente .
El sol de la montaña: considerado como “traidor”. No lo notamos, pero luego llegamos a casa quemadas después de una excursión.
El sol de la ciudad: creemos que es “inofensivo”. Debemos tener conciencia de que a pesar de los edificios, nuestra piel sigue recibiendo toda la fuerza de los rayos.
¿Qué es la radiación solar?
Es el flujo de energía que recibimos del sol. Una exposición sin protección está ligada a quemaduras, envejecimiento prematuro y graves enfermedades cutáneas
La radiación UV-A aumenta la formación de radicales libres, produciendo un envejecimiento prematuro y daños permanentes en la dermis. Es también responsable de diferentes efectos biológicos como el bronceado inmediato, el fotoenvejecimiento y las manchas solares de la piel.
La radiación UV-B es la responsable tanto del bronceado como de las quemaduras solares. Provoca alteraciones visibles en el tono y aspereza de la piel, así como cambios en la estructura de nuestro ADN.
La radiación Infrarrojo-A (IR-A) tiene efectos nocivos sobre la piel, ya que penetra hasta la capa más profunda: la hipodermis. El resultado visible es la presencia de arrugas más profundas y numerosas, pérdida de elasticidad, pérdida de colágeno, en definitiva, fotoenvejecimiento de nuestra piel.
¡El sol sale cada día! Por eso, si queremos cuidar nuestra piel, debemos elegir un protector solar que sea capaz de defendernos de las tres radiaciones: UV-A, UV-B e Infrarrojos-A (IR-A). Así que una buena triple protección solar, como la de Ladival, es la mejor garantía para que nuestra piel conserve su juventud. Como hemos visto, entre los efectos adversos del sol destacan las quemaduras, las insolaciones, el envejecimiento de la piel o incluso la inducción del cáncer. De ahí la importancia de protegerse de las radiaciones solares con un producto que nos permita disfrutar de los efectos beneficiosos (bronceado sano y saludable, buen humor, calor, vitamina D…) sin preocuparnos de los riesgos.
Ladival Urban Fluid
El sol es necesario para nuestro día a día: nos mejora el estado de ánimo, es una fuente de luz y vida, nos broncea, nos aporta vitamina D… pero para exponernos al sol es preciso que nos protejamos eficazmente para prevenir quemaduras, enfermedades en la piel y un envejecimiento prematuro. Ladival Urban Fluid es la nueva protección solar facial de Ladival de rápida absorción. Está formulado con un aditivo de origen natural que se armoniza con la piel y proporciona una protección invisible frente a la luz solar. Su textura fluida ultraligera proporciona un efecto matificante para un acabado sin brillos. Con un factor de protección solar (FPS) 50+, es el complemento perfecto para cualquier hora del día y situación. Además, su formulación sin lo hace adecuado para a todo tipo de pieles, incluso las más sensibles.
¿Cómo aplicar el protector solar?
Aplique el producto dando un suave masaje siguiendo la dirección de las flechas, garantizando así su eficacia y evitando la pérdida de firmeza y elasticidad de la piel, así como los signos de fotoenvejecimiento.
Para obtener el nivel de protección solar indicado, aplicar el producto en cantidad suficiente:
1. Rostro: Utilizar un dedo de producto y extender uniformemente, sin olvidarnos de la zona de las orejas.
2. Escote: Utilizar un dedo de producto sin olvidarnos del mentón.
3. Labios: Realizar 7 pasadas de stick labial por los labios.
4. En la zona del cuerpo: Brazos, pecho, abdomen, piernas, espalda, lumbares, aplicar 2 dedos de producto por zona, sin olvidarnos de los pies, la nuca y las manos.
Ladival Niños y pieles atópicas
¡Los peques no paran! Y menos con el buen tiempo: van
de un lado para otro y nunca se les acaban las pilas. Por
eso es tan importante usar un protector solar que cuide
de su delicada piel.
Ladival Niños y pieles atópicas es un protector solar en
leche altamente hidratante y enriquecido con Vitamina
E y aceites nutrientes. Su triple protección permite que
los peques puedan estar expuestos al sol con seguridad
y que disfruten del aire libre sin los efectos dañinos de la
sobreexposición solar. De hecho, Ladival Niños y pieles
atópicas puede utilizarse en bebés a partir de 0 meses.
Sin embargo, no se recomienda la exposición directa del
bebé al sol en ningún caso, ya que una quemadura solar
condicionará la salud de su piel cuando sea adulto.
Además, está especialmente indicado para pieles
atópicas de todas las edades. ¡Para que todos podamos
estar bien protegidos del sol!
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